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Emily Dickinson daguerrotype, c. 1846-47
Era tan tímida que, para que le hicieran la ropa, tomaban las medidas a su hermana Lavinia; vistió sólo de blanco durante muchos años (“Wear nothing commoner than snow”); y muy raramente escribía la dirección en un sobre, temerosa de que su letra pudiera ser vista por ojos desconocidos. Cuando la interrogaron acerca de sus compañeros, respondió por carta a Thomas Wentworth Higginson: «Las colinas, señor, y el atardecer, y un perro más grande que yo que me compró mi padre».
Billy Collins, “Emily Dickinson: An Introduction”, en The Selected Poems of Emily Dickinson, The Modern Library, New York.
A word is dead
When it is said,
Some say.
I say it just
Begins to live
That day.
Una palabra muere
–algunos sostienen–
al ser dicha.
Me parece que sólo
ese día, y no otro,
cobra vida.
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New Emily Dickinson photograph
Traducción de niki
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